Mi mujer me engaña con su compañero de trabajo lo trae a casa y termino siendo un cornudo complaciente. Hola mi nombre es Juan Carlos actualmente tengo 40 años, les voy a contar el relato de como mi esposa Julisa me era infiel, creía que yo no lo sabía y terminó haciéndome un cornudo feliz. La historia comenzó, cuando mi esposa Julisa, de 26 años de edad, trabajaba en una empresa privada de seguridad, Julisa tenía un cuerpo espectacular, unas piernas torneadas hermosas, unos pechos muy grandes que llamaban la atención a cualquier hombre o mujer y un trasero muy cogible, siempre ha sido muy risueña, hasta la fecha. Se me ocurrió marcarle por teléfono para saber si iba a salir pronto para esperarla o me iba a la casa, obviamente no le dije que estaba afuera de su oficina. Osea que no era la primera vez, cerró la puerta con llave, se metió al baño se desvistió y se puso su ropa de dormir, al entrar en la cama me abrazó y me despertó con un beso. Se fue subiendo por mi estómago, mi pecho hasta llegar a la boca, nos besamos desenfrenadamente y solita busco mi miembro para introducirlo en su vagina que estaba chorreando, bien mojada, no se si de su humedad o de semen de su amigo, se movía como diosa, entraba y salía una y otra vez como si no lo hubiera hecho en años, estaba insaciable. Sus palabras provocaron que me vaciara dentro de ella, quedé exhausto, débil; de inmediato se fue al baño a limpiarse y regresó a la cama. Eso lo hacía de manera cotidiana, casi todos los días llegaba tarde, no siempre lo hacíamos pero la verdad es que llegaba como perra en brama y se daba unas cabalgadas de antología. Esa noche llegó como a las 2 de la mañana pero no venía sola, antes de llegar me marcó por teléfono.
Separó su boca y su cabeza estaba ya en las afuerasde la ciudad su marido seguia conduciendo, cuando el corneador se safo de ella se arrodillo en el suelodelcoche y comenzo a besar entre sus bragas sintio su lengua en las bragas aprisionando el chocho de ella, sabia que estaba muy excitada incapaz de pararse ya solo deseaba corrersey tener entre sus manos su boca y su coñoaquello que habia tocado con su mano deseabaverlo ver como era de forma inminente los segundos le parecian horas, su marido cogio u desvio escucho las ruedas del coche como ya no era carretera sino tierra el corneador seguia besando sus muslos su coño sin separar las bragas ella empezo a mover su culitopara pegar mas la cara de él a su coñopero sin atreverse a cogerlo por la cabeza. El coche paro era una noche de verano calida, estrellada y clara de luz de luna, las puertas seabrieron su amante fue saliendo tirando de ella, ella se dejo llevar vio a su marido a un lado sin ipedirnada solo mirando comoel corneador la colocaba ahora sobre el capo del coche le quitaba ls bragas ellamiraba a su marido este se habia bajado el pantalon viola polla que tambien conocia como se la cogia en lamano y se masturbaba viendo como ellaestaba con las piernas abiertas estirada sin bragas le levanto las piernas el corneador ante su maridoy de nuevo hundio su cabeza en su coño, esta vez sin bragas, sintio su lenguaella no dejaba de mirar a su marido pero exo le hacia excitar mas aambos, al poco ella estaba gritando pensando en la polla que iba a tener entre sus manos, pronto, eso hizo se corriera mas apriesa ante la vista de su marido. Empezo a gritar incapazde contenerse, hasta que sintio como se coria en la cara del corneador, espero que la dejarapero no fueasi casi al instante el selevanto le quito el vestido quedosolo con las medias los zapatos y el sujetador él salvaje le saco las dos tetas por encima del sujetador comenzo a morderlas pero poco tiempo pues la hizo volver al suelo sus piernas aora de pie la volvio y ella sintio como le daban un azote en el culo, lejos de dolerle por su vientre subio una exitacion y cosquilleoque terminoen un gemido por la boca, pero al instante sintio un nuevo azote a la vez que él la agarraba de su largamelena obligandola a colocarse de pie encorvada apoyada ahora su cabezay hombros en el capo. Lejos de enfadarse, ella sintio al verse tratada asiun nuevo deseo al verse ante aquella polla la agarro y comenzo a besarla a idolatrarla, el placer que lehabia dado tenerla alli dentro no habia tenido un orgasmo semejante en su vida ni tan rapido ni tan fuerte y aquella polla comenzo a idolatrarla a besarla a besarsus huevos, ni pensaba sisu marido seguia mirandola o no le importaba queria disfrutar cada segundo teniendo en su mano aquella verga, como besarla con sus labios hastaque el corneador la obligo a meterse el galnde en su boca aquello le proporciono placer élpronto paso a meterle su polla con fuerza moviendose en su cabeza, la saco se la paseo por toda la cara ella sentia un inmenso placer al verse tratada de esa forma, cuando de nuevo se vioen volndas de pie, sin derecho a decidir se vio de nuevo en la posicion primera recibio dos azotes y al instate la verga en su coño ya bien abierto por ella, sin imaginar quede nuevo en isntantes se sintio super caliente. Poseída comenzo de nuevo a geir fuerte éla darle fuerte con su polla ademas de algun espaciado azote en sucuo escucho como su marido se estaba corriendo ella comenzo a gritar volvio a correrse, entre grandes gritos solo ue esta vez se sorprendio al escucharse pedir a su vez que le pegara en el culo, de neuvo quedo muy debil quieta de nuevo el la obligo a arrodillarse le puso su verga en la cara la paseo a su antojo por toda ella quieta sumisa sintiendo la polla por su cara y como él se la meneaba a su vez entre gemidos hasta que ella consiguio quitarsela empezo a menearla ella a chuparla él quedo ahora indefenso quieto solo gritnado gimiendo mirando como ella maneaba su polla hasta que se corrioentre gritos y largos chorreones de leche en su boca en su cara y en sus tetas. Esta prohibido publicar mensajes, fotografías, vídeos, y cualquier otro medio multimedia que tengan relación con la Pornografía Infantil. Tenía que volver a ser penetrado. Una tarde de paseo.